Llegué a casa de Claudia y llamé al timbre. Cuando abrió saltó Lucia a mis brazos y la abracé.
-Ei peque, ¿Que tal?- la besé.
-Te he echado de menos, he tenido una pesadilla- se acurrucó en mi hombro.
-Bueno, ya sabes que eso no se cumple, yo te protejo.
Miré a Claudia y me indicó que entrara, fuimos al salón y dejé a Lucia en el sofá.
-Peque, ahora vengo voy a hablar con Claudia ¿Vale?
-Vale- me dio un beso en la mejilla.
Cogí a Claudia de la mano, fuimos a su cuarto y cerré la puerta. Ella me abrazo y le rodee la cintura.
-Mi niño, ¿Como estas?- me besó.
-Bueno, tengo que contarte.
-Dime cielo- nos sentamos en la cama.
-Esta en coma- respiré hondo- y ayer vino una amiga de Granada.
-¿Quien?- me miró.
-Carmen, ha dormido en mi casa en el cuarto de Lucia asi que bueno por lo menos no he estado tan mal.
-No me habías contado nada sobre esa chica.
-Tampoco habia nada que contar- la abracé.
-¿Quieres que Lucia se quede estos dias en mi casa? No hay problema, tu puedes estar con tu madre y te vienes aqui o no se- entre cruce nuestras manos.
-Ahora que esta Carmen dormiré en casa, y si mi madre no mejora me vengo cuando Carmen se vaya y dormimos juntos- me quedé mirando nuestras manos.
-Vale cielo, lo entendió- me besó y sonreí.
-Te quiero muchísimo mi chiquitina.
-Anda que yo a ti- nos abrazamos.
Estuvimos hablando y decidimos dejar a Lucia con ella y asi no me preocuparía yo.
Salí de la casa de Claudia despidiendome con un beso a cada una. Fui directo al hospital y alli pasé casi todo el dia mirando a mi madre y sujetandola de la mano. Pasaban las horas y solo escuchaba el sonido del reloj, de vez en cuando pasaban enfermeras y médicos y me explicaban cosas o hacían pruebas. Me mantuve en todo momento fuerte e intentaba demostrad la mayor madurez posible.
Miré el reloj y marcaban las 21:30, y entró por la puerta un amigo de mi madre, me acerqué a el.
-Hola Dani, ¿Como esta?
-Hola, pues no ha presentado nada grave- bostecé.
-Chico será mejor que vayas a dormir, si quieres puedo quedarme yo esta noche-me pusó la mano en el hombro.
-No se preocupe de verdad.
-Dani, tu madre lo haria por mi por favor vete- le mire.
-Gracias- recogí mis cosas y le mande un mensaje a Carmen "voy para casa ahora nos vemos".
Marqué el numero de Claudia y espere a que contestara mientras sonaba.
-Hola cielo.
-Hola amor, era para saber como esta Lucia y si no te estaba molestando mucho- rió.
-Sabes que tu hermana nunca es molestia.
-Gracias de verdad, cuando llegue a casa te llamo, te quiero.
-Vale, te quiero gordo.
